Que levante la mano aquella que no haya criticado su cuerpo alguna vez en la vida o lo haya comparado con el cuerpo de alguna supermodelo o con otra mujer que “tiene el cuerpo perfecto”. Es probable que no hayas levantado la mano; y es que este es uno de los primeros errores que cometemos y que de alguna manera le heredamos a nuestros hijos, cuando se trata de la forma en cómo percibimos nuestra figura. Aquí te contamos cómo enseñarle a tu hijo o hija a amar su cuerpo.
Solo piénsalo, ¿cuántas veces viste o escuchaste a tu mamá o papá, hablar de lo que es “un cuerpo perfecto”? Seguramente te tocó la generación de aquellos que pensaban que el 90-60-90 era lo ideal pero ¡honestamente! ¿cuántas sí tienen esas medidas?
Y es que debido a que varias terminamos traumadas y día a día luchamos con la falsa idea de lo que debería ser un cuerpo perfecto, es importante que nuestras hijas e hijos no pasen por esta tortura y es que afortunadamente cada vez más se ha ido generando esta cultura del amor propio, del autoaceptamiento y de entender que nuestro cuerpo es perfecto así como es, que no requiere comparaciones y es bello así sin más.
Para evitar que nuestras hijas e hijos atraviesen por esta tortura constante de comparación, te contamos qué puedes hacer para enseñarle a amar su cuerpo.
Ahora bien, es importante entender que los niños comienzan a formar percepciones de sus cuerpos en la primera infancia, especialmente cuando llega la pubertad. En este momento, las niñas y los niños se vuelven más conscientes de su apariencia y son víctimas del bombardeo digital donde su autoestima es delicada.
Cómo enseñarle a tu hijo o hija a amar su cuerpo
Sé un buen modelo
Como ya dijimos, empieza por ti. Deja de juzgarte frente al espejo o de opinar por los cuerpos de otras personas. Enséñale que cada cuerpo es diferente y es perfecto. Las mamás que luchan con su propia imagen corporal negativa deben buscar ayuda para ellas mismas.
Cuida tus palabras
Palabras como “gordo”, “delgado”. “estoy a dieta”, “qué gorda estoy”, “odio mi panza”, velas eliminando de tu vocabulario. Pídele a tus familiares o círculo cercano que evite bromas sobre el peso de otras personas.
Alimentación saludable
Si una cosa es segura es que, no todos sabemos comer. Y es que no importa si eres vegetariano o no, comer bien es importante para la salud mental y física de tus hijos. Consulta con un nutriólogo y pregúntale cómo enseñar a tu hijo a comer bien pero también para que tú lo hagas. Evita darle comida chatarra y olvídate de vivir a dieta constantemente. Una gran idea es involucrar a tus hijos en la preparación de los alimentos.
Explícale los cambios de su edad
Háblale de los cambios corporales y que son una parte perfectamente normal del crecimiento. Explícale sobre cómo todos vienen en diferentes formas y tamaños, y lo que importa es estar saludable y sentirse bien consigo mismo.
Invítalo a hacer ejercicio
Las actividades físicas, como los deportes, el baile y las artes marciales, pueden ayudar a promover una imagen corporal positiva. Además de que después de practicarlo seguramente se sentirán más felices por la liberación de hormonas.
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