Es muy importante cuidar de tu vagina para evitar las molestas infecciones. Y aunque llevar una buena higiene de tu zona íntima es indispensable, hay algunas cosas que te pueden ayudar a reforzar ese cuidado, como el uso de probióticos inteligentes. ¿Quieres conocer sobre ellos? Sigue leyendo.

Seguramente, has escuchado hablar sobre la “microbiota” intestinal y de por qué mantenerla sana nos permite llevar una vida más saludable. Pero no es el único sitio con esas características: tu vagina también cuenta con un ecosistema lleno de vida microscópica que incluye bacterias buenas (lactobacilos), virus y hongos que, cuando están equilibrados, crean una barrera adecuada que te protege de infecciones y enfermedades.

Cuando este equilibro se rompe y la cantidad de lactobacilos vaginales disminuye, por el uso de antibióticos, la menstruación, las duchas vaginales, ciertas infecciones de transmisión sexual y presencia de semen, las otras bacterias u hongos que están presentes en la vagina crecen en exceso y ocasionan comezón en la vulva, flujo blanco y olor a “pescado”, síntomas claros de una infección. Si esto sucede, el camino que tomará el médico seguramente incluirá el uso de antibióticos que destruyen la infección, pero también estos organismos buenos.

¿Cómo puedo cuidar mi zona íntima?

Existen hábitos diarios que te ayudarán a mantener el equilibrio de tu ecosistema vaginal, como:

  • Tener una higiene íntima adecuada: siempre asegúrate que tu área genital esté limpia y seca. Usa jabones específicos y no productos perfumados, aerosoles o polvos.
  • Acudir al ginecólogo: a tus revisiones anuales y cuando aparezca cualquier signo.
  • Llevar una alimentación saludable: incluye productos que ayuden a tu microbiota, como los vegetales o el yogurt, y reduce el consumo de carbohidratos y azúcares.
  • Mantener una buena hidratación: tomar las cantidades adecuadas de agua ayuda a prevenir las infecciones.e
  • Utilizar ropa interior de algodón: busca que sea transpirable y no cause irritación.

Probióticos inteligentes para tu vagina

Estos hábitos pueden complementarse con el uso de probióticos, que son bacterias que permiten que todos los nutrientes, vitaminas y minerales que se encuentran en el organismo se aprovechen al máximo. Estos microorganismos vivos pueden ser los mejores amigos de las mujeres, no solo para su microbiota intestinal, sino vaginal.

Hasta hace poco, se pensaba que el efecto de los probióticos era solamente local y que solo apoyaba a las funciones digestivas; sin embargo, se ha comprobado que no solo ayudan a la correcta digestión, sino a mantener el cuerpo en balance restableciendo los lactobacilos que conforman la flora intestinal y vaginal sana, y a reforzar el sistema inmunológico (generar ácido láctico que protege la piel de agentes contaminantes).
Existen diversos tipos y cada uno de ellos ayuda con diferentes tareas. Para las mujeres interesadas en cuidar su flora vaginal, lo pueden hacer de manera tópica (óvulos que se introducen en la vagina, los más comunes) u oral, por medio de suplementos inteligentes, como el PROBIVOS Fem de Matter, que las ayudan a recuperar y mantener los lactobacilos que conforman ecosistema íntimo; a regular el intestino femenino y la mucosa vaginal; a mejorar el estreñimiento, aliviar la inflamación ginecológica y también a regenerar y preservar el colágeno (el responsable de que tengamos una piel y pelo más joven, luminosa e hidratada). ¿Se te antoja probarlos?

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