Así como hay niños extrovertidos, que no tienen ningún problema con desenvolverse, también hay algunos que son introvertidos y que se les dificulta relacionarse con la gente. A continuación te presentamos 3 ejercicios para que tu hijo sea más sociable.
¿Por qué tener habilidades sociales?
Es muy válido que como mamá digas: “bueno, no quiero obligar a mi hijo a que haga algo que no quiere” pero, es importante ofrecerle herramientas que le ayuden a socializar. Estas tendrán un impacto positivo en su vida, ya que las personas con buenas habilidades sociales, saben qué decir, cuándo, cómo y dónde. Estos son 3 ejercicios para que tu hijo sea más sociable, le ayudarán porque están avalados por los expertos en tutoría de GoStudent.
Ejercicios para que tu hijo sea más sociable
- Juego de miradas
Hacer contacto visual con el típico juego de “a ver quién cierra los ojos primero” le ayudará a desarrollar seguridad para mantener la mirada en la gente. Puedes practicar colocándote un sticker en la frente e invitarlo a que la siga con la mirada para estimular que mire en la dirección correcta.
- Expresar sus emociones en voz alta o mímica
El juego de mímica o el poder escribir y leer en voz alta puede ayudarlo. Muchos malentendidos surgen de que los niños malinterpretan las emociones de los demás. A veces pueden confundir fácilmente una mirada de decepción y pensar que alguien está enojado.
- Mantenerse en un tema
Para los niños es un desafío seguir en un mismo tema porque suelen distraerse pero, también porque pueden sentirse abrumados y prefieren abandonar para no seguir sintiéndose incómodos. Por eso ayúdalo con el juego de la narración improvisada.
- Pon algunas imágenes de diferentes emociones boca abajo sobre la mesa.
- Luego, los jugadores deciden juntos sobre algunos elementos que deben aparecer en ella (por ejemplo, un parque, unos lentes y un plátano)
El objetivo es que los jugadores se turnen para componer la narrativa, basándose en las ideas de los demás y haciendo uso de todos los elementos de la historia.
- Para comenzar, el primer jugador elige una carta y comienza la narración. Puede llevar la historia en la dirección que quiera, pero debe incorporar la emoción representada en la tarjeta y los por lo menos uno de los elementos que entre todos eligieron.
- Después de uno o dos minutos, el siguiente jugador elige una nueva carta y continúa la narración.
- Los jugadores continúan turnándose hasta que hayan utilizado todos los elementos de la historia requeridos y hayan llegado a una conclusión satisfactoria.
Esperamos que estos ejercicios puedan servirte para que tus hijos se vuelvan un poco más sociables.
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