Aserrín Aserrán

Si eres de esos padres obsesionados con la pulcritud de tus hijos, te tenemos noticias, dejarlos que se ensucien tiene sus ventajas. Sigue leyendo y descubre cuáles.

Típico que eres mamá o papá y no quieres que el perrito de la familia se acerque al bebé o que esté expuesto a lugares con polvo porque “no se vaya a enfermar o a manchar”, queremos explicarte por qué un niño debe ensuciarse.

Ventajas de que tu hijo se ensucie

Sí, todas sabemos y comprendemos la angustia que nos causa pensar que nuestros pequeños se puedan enfermar y queremos que eso nunca pase. Pero tampoco se trata de llegar al extremo de querer que todo cuanto rodea a tu hijo esté limpio y libre de bacterias o microbios. ¿Sabes por qué? Porque podría no ser tan benéfico como crees.  

Si como mamá/papá ya detectaste que estás un poco obsesionado con la limpieza de tu bebé, es súper importante que conozcas a fondo la hipótesis de higiene, la cual propone que la exposición a gérmenes y determinadas infecciones en la infancia ayudan al desarrollo del sistema inmunitario. ¿Qué quiere decir eso? De alguna manera esto enseña al cuerpo a diferenciar las sustancias inofensivas de las sustancias nocivas. En teoría, la exposición a determinados gérmenes enseña al sistema inmunitario a no reaccionar en exceso, explica Mayo Clinic. 

Incluso se dice que la exposición a determinados gérmenes desde que estás embarazada podría resultar favorable en el desarrollo del sistema inmunitario y el microbioma intestinal de tu hijo. ¿Puedes creerlo?

De acuerdo con una investigación de Science, la exposición a microbios durante la primera infancia se asocia con la protección de enfermedades inmunomediadas, como la enfermedad inflamatoria intestinal y el asma.

Ahora que eres madre/padre, debes comprender que todo lo que hagas por tu hijo debe ser de manera equilibrada, de lo contrario, cualquier extremo podría afectarlo.  

Si bien ahora ya sabes por qué un niño debe ensuciarse, con esto no queremos decir que descuides la higiene de tu bebé, simplemente deseamos que te sientas con mayor seguridad si él recibe una lengüetada inesperada de su perrito o si pasa horas en el jardín con su abuelita. Tu hijo estará bien.

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