Aserrín Aserrán

Una de las dudas más comunes es sobre dónde debe dormir el bebé. Algunos dicen que en la cuna, otros que el cama de mamá. Si decidiste que tu bebé duerma contigo, hay algunas cosas que debes de saber.

Uno de los miedos y dudas más comunes de las mamás es saber si en realidad es bueno dormir con nuestros bebés. Hay muchos mitos sobre el daño que puede hacerle a un bebé dormir con sus papás, sin embargo, los beneficios suelen ser mayores a los peligros de esta práctica. 

Si bien, el colecho es una práctica que ha tomado popularidad en los últimos años, para que realizarla sea segura para ti y tu bebé hay cosas que debes tomar en cuenta, como lo son:

El lugar: Si ya decidiste a dormir con tu bebé, debes tomar en cuenta donde puedes hacerlo y donde no. Tu cama es perfecta para ello, pero un lugar que debes evitar es el sillón, ya que el peligro de que el bebé caiga o le impida respirar es mayor. Otra práctica que puedes poner en marcha es poner la cuna del bebé junto a tu cama, de esta manera tendrás cerca a tu bebé, pero cada quien en su espacio.

Las cobijas: Debes tomar en cuenta que, al dormir con tu bebé, no puedes usar demasiadas cobijas. Esto puede ser peligroso ya que puede haber lo que se conoce como “muerte súbita del bebé lactante”.

Beneficios de dormir con tu bebé

Puede que te de miedo, pero hay muchos beneficios que puede traer el practicar el colecho, tales como lo son: 

• Mejor control del sueño: El sueño de tu bebé se va a regular hasta los 5 o 6 años, sin embargo, dormir con ellos desde que son bebés les puede ayudar a dormir mejor.
• Es más fácil amamantarlos: Una de las ventajas para nosotras las mamás es el no tener que levantarnos cada que vez que vamos a darles de comer, si es que estamos amamantando. Hay muchas posiciones para poder darle de comer mientras están acostados.

Hay estudios que dicen que los bebés deben dormir con la mamá al menos hasta los 3 años, sin embargo, la decisión es completamente personal. Si decides que tu bebé duerma contigo o no y hasta cuando lo hace no afecta a otros aspectos de su crianza, por lo que no debes sentirte mal por no hacerlo.