Cuando una mujer decide que quiere tener un bebé, comienza a cambiar gradualmente sus hábitos; deja de fumar, interrumpe su método anticonceptivo, se alimenta sanamente y, en algún momento, comienza a consumir ácido fólico. ¿Realmente sabemos la razón de incluir esta vitamina en nuestra dieta?

El ácido fólico, también conocido como vitamina B9, desempeña un papel clave en el crecimiento y desarrollo de las células del embrión, así como en la formación de los tejidos.

La Secretaría de Salud en México reporta que aproximadamente de 2-5% de los bebés nacidos vivos y 15% de los recién nacidos muertos presentan algún tipo de defecto estructural-anatómico. Los más frecuentes y estudiados de este tipo, son los defectos del tubo neural.

¿Qué es el tubo neural? Es la estructura de la cual se origina el sistema nervioso central del embrión. Cuando el feto presenta una deficiencia en el tubo neural embrionario puede desarrollar algún tipo de alteración como: anencefalia (formación incompleta de cerebro y cráneo), espina bífida (formación incompleta de las vértebras o medula espinal) y la hidrocefalia (exceso de líquido en el cerebro).

La buena noticia es que en cierta medida, podemos evitar estas alteraciones consumiendo ácido fólico antes de la concepción y al menos, durante los primeros tres meses del embarazo.

Consumo de ácido fólico

La Secretaría de Salud recomienda que todas las mujeres en edad fértil (sobre todo, si tienen la idea de quedar embarazadas) consuman cerca de 400 microgramos (0.4 miligramos) de ácido fólico todos los días.

Como nuestro cuerpo no lo produce, debemos incluir en nuestra dieta alimentos que si nos lo proporcione, como vegetales de hoja verde y granos enriquecidos.

Es tan importante el consumo de esta vitamina que a partir de 1995 se creó una campaña para que toda mujer en edad reproductiva asegure una ingesta diaria de 0.4 mg (400 mcg/día), permitiendo la suplementación de cereales y harinas comerciales con ácido fólico.

Aún así, si realmente estamos en la búsqueda de bebé o estamos iniciando nuestro periodo gestacional, se recomienda adquirir vitaminas de ácido fólico porque nuestro cuerpo solo absorbe una parte de lo contenido en los alimentos.

Acércate a tu ginecólogo y pídele que te indique la dosis adecuada para ti.
Si quieres conocer qué cosas debes considerar para tener un embarazo saludable, esta nota es para ti.