¿Por qué los mayores dejamos de jugar? A lo largo de la maternidad hemos escuchado las ventajas y beneficios que estos tienen para nuestros hijos, pero también los tiene para nosotros “los grandes”. Descubre cuáles son.

¿Qué pasa si un día, además de concentrarnos en que nuestros hijos disfruten de jugar, también nosotros lo disfrutamos de manera consciente? ¿Alguna vez te has preguntado qué beneficios trae para nosotros? 

Seguro has escuchado la frase “No se deja de jugar porque se es viejo, sino que se es viejo porque se deja de jugar”. Las investigaciones demuestran que hacerlo es una forma de disfrutar la vida y sacarle provecho. El juego permite a las personas ser jóvenes de corazón y de espíritu libre.

Además, es una herramienta terapéutica exitosa que ayuda a reducir el estrés, la depresión y la ansiedad. No solo prolonga la vida de las personas, sino que nos ayuda a ser creativos en situaciones tensas y resolver problemas. 

Sabemos que las actividades diarias, el trabajo, la casa, horarios apretados no nos permite reservar un tiempo para divertirnos, pero no necesitamos mucho tiempo para hacerlo. A veces, con observar a los hijos mientras juguetean, escuchar sus divertidas historias y formar parte de ellas, y convertir las actividades ordinarias en extraordinarias ya estaremos dándole un twist al asunto. 

Te invitamos a que te diviertas más, disfrutes más los pequeños momentos, rías y disfrutes junto con tu pequeño esos momentos de juego.  

Ventajas de jugar con los peques

  • Se establecen vínculos emocionales positivos.
  • Se siente amado.
  • Genera empatía con otras personas.
  • Refuerza su seguridad y autoestima.
  • Aprende a compartir su tiempo y espacio.
  • Reduce estrés y ansiedad.
  • Refuerza su salud emocional.
  • Se fomenta el hábito de la convivencia.

¿Tienes un bebé y no sabes qué actividades hacer para desarrollar su motrocidad? Lee esta nota