Si por mucho tiempo ha pasado por tu mente la idea del divorcio, te sugerimos que sigas reflexionando tranquilamente sobre la decisión ya que no debe ser tomada por impulso.

Hoy queremos compartirte 11 preguntas clave que te ayudarán a tener mayor claridad a la hora de considerar esta opción.

1. ¿Has dejado claro lo que te molesta de la relación?

De acuerdo con Sherry Amatenstein, terapeuta de parejas y autora de libros sobre relaciones, dijo: “Tú puedes pensar que te has comunicado, pero es posible que tu pareja en realidad no haya escuchado”. 

Cuando uno se encuentra en una discusión, solo escuchamos el 30 o 35% de lo que nos dicen, ya que nos enfocamos más en aquello que vamos a responderle al otro. 

Si crees que para tu esposo no eres una prioridad, debes hacer que tu pareja sea consciente de tu sentir para que él o ella pueda cambiarlo.

Sin importar si se salva o no tu matrimonio, la psicoterapeuta Nancy Colier recomienda siempre hablar honestamente con tu pareja. 

2. ¿Tanto tú como tu pareja han dejado claras las expectativas sobre el rol de cada uno en la relación? 

Hope Adair expresa: “A veces el problema puede ser tan simple como no entender de qué manera espera tu pareja que te portes”. 

3. ¿Cuál sería la manera de salvar tu matrimonio?

Kevin Wright, reverendo de la iglesia Riverside de Manhattan, recomienda que tanto tú como tu pareja hagan el siguiente ejercicio. 

En una hoja de papel o en un documento digital, escriban una lista sobre lo que creen que necesitan para salvar su matrimonio, y del otro lado anoten lo que necesitan que su pareja realice, cada uno por separado. 

Ambos deben hacer este ejercicio o de lo contrario podría confundirse con lo que únicamente debe hacer el otro para mejorar la relación. 

4. Pregunta seria: ¿realmente serías más feliz sin tu pareja?

Quizá tu pareja ya no te atrae en la intimidad, pero su instinto paterno o materno, así como su disposición para realizar las tareas del hogar y su compañía, compensan las cosas negativas. 

La especialista Colier expresa, “tienes que considerar con valentía y realismo si lo que estás obteniendo de la relación compensa lo que estás dejando”. Sin embargo, tener una idea de lo que quieres en tu vida puede ayudarte a tomar una decisión. 

5. ¿Todavía sientes amor?

Aunque tu respuesta sea afirmativa, a veces la separación es el mejor camino. La escritora especializada en relaciones, Wendy Paris, dice lo siguiente: “Buena parte del enojo que vemos en los divorcios surge del hecho de que todavía amamos a esa persona, y podemos sentirnos lastimados, faltos de amor recíproco o infravalorados”.

6. ¿Cuál es tu mayor miedo si se termina la relación?

Sé sincero contigo mismo y piensa cuál es tu mayor miedo al finalizar tu relación ya que posiblemente eso pueda hacerte permanecer más tiempo en ella. 

Reflexiona si tu miedo radica en quedarte solo o perder la intimidad física. Pensar en tus miedos podría ayudarte a decidir si el divorcio es la mejor opción. 

7. ¿Estás permitiendo que la posibilidad del divorcio arruine la imagen que tienes de ti mismo?

Sentirse fracasado cuando un divorcio está casi a la vuelta de la esquina, es algo normal. Sin embargo, en lugar de enfocarte en las equivocaciones cometidas, ve el final de manera que te empodere más, explica Wendy Paris.  

8. ¿Cómo pueden manejar el divorcio para minimizar el daño a sus hijos?

Quizá pueden poner punto final a su relación de pareja pero siempre serán padres de sus hijos, por lo que van a seguir en la vida del otro. 

Deben pensar y solucionar de qué manera le harán para que funcionen como equipo pensando siempre en el bienestar de sus hijos

9. ¿Estás preparado para las tensiones económicas que puede conllevar un divorcio?

Colier sugiere hablar con un consultor financiero o abogados para saber cuánto va a costar todo el proceso. Este cambio radical puede afectar a tu economía, por lo que es ideal que tengas todas tus dudas resueltas para sentirte seguro. 

10. ¿Estoy listo para solucionar los detalles del día a día de los que se hacía cargo mi pareja?

Pensamos que estamos listos para un divorcio pero realmente estamos poco preparados para la transición. Considera que ahora serás tú quien haga ciertos pagos o resuelva cuestiones de la escuela de los niños. 

“Nuestra falta de preparación es un aspecto más del caos”, agrega París.  

11. ¿Cómo evito cometer el mismo error en el futuro?

Ojo, es posible que el problema puedas ser tú y no ese matrimonio en particular. 

Erika Doukas, psicóloga de Manhattan dice que si estás aburrido en una relación, puede que te pase lo mismo en otra también. O bien, si peleas con tu pareja sobre qué familia visitar en vacaciones, el mismo conflicto puede aparecer en otro matrimonio. 

La especialista Doukas explica que las parejas que son capaces de darse cuenta de su contribución a los problemas maritales en ocasiones pueden cambiar el rumbo y posiblemente salvar la relación, o al menos hacer que la próxima dure más tiempo. 

Si conoces a alguien que esté pasando por un proceso difícil y considere poner fin a su matrimonio, comparte con él o ella esta serie de preguntas que debes hacerte antes del divorcio.

Con información de The New York Times