Aserrín Aserrán

El olor a bebé es algo característico, y sin duda alguna, algo muy adictivo. Y es que cargar a tu bebé, o incluso a otro, es un reflejo de olerlo y disfrutar ese aroma tan característico, pero ¿será verdad que es adictivo?

Después del nacimiento de tu bebé, especialmente para las mamás primerizas, es seguro que la familia y amigos que han podido visitarlo se desbordan en amor y halagos para ti y para él. Pero hay algo en particular que mucha gente hace y menciona: “que rico huele” o “huele a bebé”.

Y si, este olor es uno de esos que no podemos describir tan certeramente, pero que todos reconocemos, especialmente las mamás y, a pesar de lo que pudieras creer, todo esto tiene un fundamento científico.

¿De dónde proviene el olor a bebé?

Este olor es una pequeña mezcla del líquido amniótico y el unto sebáceo en el que nada el bebé durante 9 meses. A pesar de todos los baños que pueda recibir, este olor tan característico dura aproximadamente 6 semanas, puede ser un poco más, por eso es importante olerlo todo lo que puedas.

Pero, aunque esto explica porqué los bebés huelen como huelen, hay otra razón para que queramos olerlos todo el tiempo. La revista Frontiers in Psychology realizó un estudio en el cual tomaron a 30 mujeres, de las cuáles 15 eran mamás de un recién nacido y las otras 15 no eran mamás.

Mientras les hacían una resonancia magnética, y con los ojos vendados, les pusieron a oler diferentes objetos, entre ellos una pijama de bebé. El estudio reveló que las mujeres que acababan de ser mamás, además de reconocer el olor de inmediato, elevaban los niveles de dopamina, la cual es un neurotransmisor que genera la felicidad, y que también está relacionado con efecto similar al de las drogas. 
Así que, ahí lo tienes. No es tu imaginación que quieras estar oliendo a tu bebé todo el tiempo, es adictivo y a tu cuerpo le produce placer, así que disfrútalo cuanto puedas.