Aserrín Aserrán

De acuerdo con investigaciones recientes, se ha identificado que los biberones liberan alto contenido de microplásticos al calentarse. Al utilizar agua hirviendo millones de microplásticos son liberados y pueden ser consumidos por tu bebé.

El estudio publicado en Nature Food y realizado por investigadores del Centro de Investigación SFI para Materiales Avanzados e Investigación de Bioingeniería (AMBER por sus siglas en inglés), señala que los biberones de polipropileno para lactantes (PP-IFB), los más utilizados en el mundo, pueden liberar hasta 16 millones de microplásticos y billones de nanoplásticos más pequeños por litro.

Es decir, cuando la temperatura aumenta de 25 a 95°C, lo que ocurre durante la esterilización o la exposición a agua muy caliente, la liberación de microplásticos aumenta significativamente de 0,6 millones a 55 millones de partículas por litro. Otros productos de plástico de polipropileno como hervidores y loncheras, también liberan niveles similares de microplásticos.

Al ser mamá, ¿cómo puedes evitar esto?

La Organización Mundial de la Salud ha brindado una serie de pautas para la preparación de la fórmula y la esterilización de los biberones, así que toma nota de ellas para que las apliques y compartas con otras amigas que también tienen hijos pequeños.

1. Primero, esteriliza el agua hirviéndola en una olla que no sea de plástico, como vidrio o acero inoxidable y déjala enfriar.
2. Enjuaga el biberón con el agua ya esterilizada a temperatura ambiente por lo menos 3 veces y luego prepara el biberón.
3. Calienta el agua y prepara la fórmula en un recipiente que no sea de plástico a una temperatura mayor a 70° C y deja enfriar.
4. Vierte la fórmula preparada al biberón y evita recalentar la fórmula en envases de plástico ni calentarlas en microondas, así como tampoco agitar la fórmula vigorosamente en el biberón, puesto que al agitarlo las partículas también se liberan.

Otra solución es cambiar los biberones de plástico por biberones de vidrio, pero estos son más pesados y corres el riesgo de que los bebés no puedan sostenerlos y los rompan. Por eso, siguiendo estas recomendaciones, puedes usar los biberones plásticos de manera segura.