Criando lejos de mitos de la familia

Convertirse en mamá no es algo sencillo. Aparte de que aprendemos de cuidados, primero auxilios, comida y un largo etcétera, buscamos criar a nuestros hijos de la mejor manera. ¿Qué pasa cuando hay mitos familiares que lejos de ayudarnos a hacerlo solo nos detienen?

No tengo nada en contra de las tradiciones. De hecho, yo misma practiqué algunas, especialmente con mi primera hija, pero después de leer e investigar sobre muchos temas relacionados con el embarazo, la maternidad y la crianza de mis hijos, me he alejado poco a poco de esos mitos que heredé y ha sido toda una odisea.

Entre mitos y creencias familiares

Soy creyente que si no le hace daño al bebé igual y no tiene nada de malo, y tampoco soy de esas mamás que se burlan de las mamás que siguen con este tipo de creencias, pero cuando comencé a tomar mi camino lejos de esos consejos familiares, sentía que me iban a expulsar de la familia.

El primero comenzó con mi embarazo, cuando decidí no usar un seguro en el vientre un día de eclipse; después, no les di ese atole de arroz que mi mamá decía “dáselos ahorita que están chiquitas, les va a ayudar a su pancita, ustedes casi no se enferman” y, el tema más discutido en las reuniones familiares, hasta la fecha, fue cuando defendí a capa y espada el tema de la lactancia. 

En mi familia era muy fuerte la creencia que, después de los 6 meses la leche materna no servía de nada. Mi intención no era iniciar una pelea, me esforcé por desmentir esas creencias, con información oficial, sin embargo, muchos me tacharon de floja o de estar consintiendo de más a mis hijas. 

El tema de seguir o no con este tipo de creencias o tradiciones es muy personal, pero algo que he aprendido es que la forma en la que criamos a nuestros hijos y la forma en la que otras mamás lo hacen no debe ser razón para juzgar a muerte a una mujer. Sé que es difícil alejarse de las tradiciones, pero si sientes que es lo mejor que puedes hacer por tus hijos, no dejes que nadie te haga pensar lo contrario, solo por un mito.