La muerte es un tema complicado para todos. No importa la edad que tengamos, siempre nos causa conflicto aceptar que los seres que amamos se vayan de nuestras vidas. Así puedes hablarlo con un niño.

 

Es entendible que en un momento tan doloroso como la muerte, los adultos estén viviendo su propio duelo y no sepan cómo manejarlo con los niños, pero no hay que olvidar que ellos perciben todo y excluirlos puede confundirlos, atemorizarlos y causarles más dolor.

Suavizando la muerte

Algunas familias creen que hay cosas que los niños no pueden comprender y que es mejor “suavizarles” la verdad, de ahí viene el clásico “no vas a ver a papá porque se fue a un viaje muy largo”. La finalidad es que el niño poco a poco vaya asimilando la ausencia, hasta darse cuenta de que en realidad el padre murió.

Sin embargo, la Psicóloga Jéssica de la Cruz señala que a la larga esto puede causar confusión en los niños, “¿todas las personas que salen de viaje abandonan a sus hijos?” e incluso puede desarrollar un apego excesivo con sus familiares más cercanos, porque el niño no asimila qué sucedió, solo sabe que alguien de su familia lo abandonó y los demás también podrían hacerlo.

Siempre la verdad

Hay quienes prefieren explicarle al niño, con argumentos sinceros y breves, que la muerte es parte del proceso de la vida. Que es algo natural, pero que también lo es sentir tristeza por la ausencia del ser querido. De esta manera, abrimos la puerta para que el pequeñín exprese los sentimientos y dudas que está desarrollando.

Igual se recomienda hacer uso de cuentos y películas para ayudar al peque a asimilar el concepto de la muerte. Así lo hizo la mami de Pilar cuando su maestra del kínder falleció en un accidente automovilístico. La niña estaba muy afectada porque quería mucho a su profesora y no entendía que alguien joven muriera. “Hablé con Pili y le expliqué que su maestra ya no iba a regresar porque su ciclo de vida había terminado, como en su peli favorita, el Rey León”.

¿Todos mueren?

Hay ocasiones en que la muerte no es tan cercana, por ejemplo, fallece el abuelo de un amiguito del colegio. Hasta ese momento tu niño no había pensado en la posibilidad de que alguien de su familia falleciera y de pronto, se da cuenta de lo vulnerable que es la vida, ¿cómo lo ayudas?

Evita crearle tabúes. Busca palabras que, de acuerdo a su edad, lo ayuden a conceptualizar la muerte. Escucha sus inquietudes, contesta sus preguntas y trata de no darle explicaciones demasiado filosóficas que solo pueden despertarle nuevas inquietudes. Es posible que lo pregunte varias veces, así que hay que tener paciencia y responderle todas las veces que quiera.

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