Detecta a tiempo si tu hijo es víctima de bullying puede hacer la diferencia en su crecimiento. Con estos consejos puedes evitarlo.

Cuando Cristina se dio cuenta de que su hija Valeria era víctima de bullying, ella ya no quería sonreír y comenzaba a aislarse de sus compañeros. Así que decidió ir al colegio para encontrar una solución. Lamentablemente, ni la maestra ni los directivos le dieron mayor importancia al asunto y la niña tuvo que ser cambiada de escuela.

Cristina no es la única mamá en México que se ha visto afectada por este tema. Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el 40% del total de alumnos de primaria y secundaria en nuestro país, han sufrido (o sufren) algún tipo de acoso escolar. De hecho, México ocupa el primer lugar internacional en casos de bullying en educación básica, afectando a más de 18 millones de alumnos de primaria y secundaria, de escuelas públicas y privadas, según lo menciona este informe.

El perfil de las víctimas

Generalmente, las víctimas son niños vulnerables, con características diferentes a las que se consideran normales. Permiten el abuso de los demás, porque debido a su baja autoestima viven inseguros, sin amigos, solitarios y retraídos. Sienten vergüenza de la situación y prefieren refugiarse en los adultos, en vez de convivir con niños de su edad.

Sin embargo, también existen las víctimas activas. Estas desarrollan actitudes agresivas y provocadoras, entrando en una dinámica en la cual son víctimas y acosadores. En algunos casos, quienes son víctimas de bullying buscan una persona más débil con quien interpretar el rol de acosador.

Señales de que tu hijo podría sufrir bullying

-Cambios repentinos de humor. Siempre había sido un niño alegre, pero últimamente tiende a la tristeza y el enojo.

-Escasa interacción social. Notas que no lo invitan a casa de sus compañeritos para jugar, ni a las fiestas de cumpleaños.

-No quiere asistir a la escuela (o al lugar en el cual se presenta el acoso).

-Bajo rendimiento escolar. La situación lo mantiene constantemente angustiado, lo que provoca dificultad para mantenerse concentrado en las actividades cotidianas.

-Trastornos psicosomáticos, ya que el estrés puede causar en su organismo insomnio, dolores de cabeza, gripa, enfermedades estomacales y/o enuresis (mojar la cama). Lo curioso es que se cura milagrosamente en vacaciones.

-Si le notas moretones, cortes, ropa rota y heridas en general, habla con él y con sus maestros. Quizá es víctima de abuso físico y si no se pone un alto a la situación, puede llegar a salir gravemente herido.

Pero, ¿cuáles son las causas?

  • Psicológicas: un niño con baja autoestima puede inclinarse por atacar antes de ser atacado. Estos pequeños pueden tener problemas para controlar impulsos y una interpretación distorsionada del bien y el mal.
  • Familiares: un hogar donde no se inculcan valores y en el cual se respira un entorno agresivo donde el acosador es la víctima, puede dar como resultado un niño acosador. En el caso de la víctima, unos papás sobreprotectores pueden ocasionar en su pequeño problemas para socializar.
  • Escolares: un sistema sin límites y con exceso de permisividad, puede favorecer la aparición del bullying. También hay que tomar en cuenta que una institución muy grande puede carecer de la vigilancia suficiente para la gran cantidad de alumnos, lo que facilita episodios de violencia.
  • Medios de comunicación: ejercen una influencia muy poderosa en el desarrollo de valores, y cuando estos son reemplazados por violencia (de cualquier tipo) pueden provocar una personalidad agresiva en los niños.

En la actualidad existen varios programas para combatir el bullying, pero no olvides que el modelo más importante que tienen los niños es el de sus padres. Si los peques ven a mamá y papá como personas que conviven de manera respetuosa, asertiva y en armonía con su familia y el entorno en general, aprenderán que eso es lo correcto y crecerán como adultos sanos, empáticos y alejados de cualquier tipo de abuso, y dejarán de replicar una conducta que le hace mucho daño a nuestra sociedad. Si por el contrario, ven gritos y violencia en casa, lo replicarán afuera.